Carta a mi yo de la juventud

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Carta a mi yo de la juventud

Querida yo… de ayer 

¡Lo vas lograr! Así es, lo vas a lograr. Vas a ser feliz, te vas a enamorar, vas a reír a carcajadas hasta que te duela la panza, hasta que llores de felicidad y te quedes sin aliento.

Habrá momentos en los que sentirás que no puedes hacerlo, pensarás en desistir, te sentirás frustrada e incluso enojada, pero no lo harás. Vas a llorar hasta sentir que no puedes respirar, que se te escapa el aire y que nadie en el mundo puede entender tu dolor, aprende a valorar esas lágrimas, ellas también te están enseñando algo.

Al final, descubrirás que el dolor pasará y que casi sin darte cuenta, te habrás convertido en una mejor persona, más fuerte, más valiente y con más completa.

¿Recuerdas ese destino al que sueñas ir? 

Irás, será aún mejor de lo que habías imaginado. Incluso, guardarás recuerdos y algunas fotos para recordarlo, los tienes guardados en una cajita, junto a tu mesa de noche. La libreta azul, contiene escritos y apuntes que tomaste para algún día, escribir ese libro, Pd: aún no lo hemos escrito, pero vamos por buen camino. 

Debes estar atenta, no pienses que siempre serás joven, el tiempo pasa muy rápido y casi sin darte cuenta te descubrirás actuando, pensando y planeando de otras maneras. Aprovecha bien el tiempo, lee más, corre más, canta más, abraza más a quienes amas, toma esas clases de guitarra que tanto estás aplazando, aprende ese idioma tan bonito del que hoy solo sabes decir Bonjour, al final esto es vivir.

No siempre encontrarás buenas personas en tu camino, algunas incluso te lastimarán, pero, no te preocupes, no lograrán derrumbarte. Pasa menos tiempo renegando de lo que te corresponde vivir y más aprendiendo de ello: sé humilde, amable, bondadosa y mira a los demás como quieres que te miren a ti.

Vas a cometer errores, algunos más graves que otros, pero no por ello sientas que no tienes valor. Al contrario, usa cada experiencia para ser mejor y entrega todo de ti en cada cosa que hagas. Te sentirás inmensamente agradecida cuando las personas te digan: ‘Se nota que todo lo haces con amor, dedicación y disciplina’. 

 

Con el paso del tiempo descubrirás que papá y mamá no son perfectos, que ellos, al igual que tú, sienten miedo, cansancio, frustración, que también se equivocan, pero que dejaron todo y lo darían todo por ti. 

No los juzgues, ni los hagas a un lado. Invita a papá a tomar un café y aprende a escucharlo, aprende lo que quiere enseñarte, a su manera, con sus palabras, él tiene mucho que enseñarte. Cuéntale a mamá lo que te gusta, descubrirás que tienen más cosas en común de las que piensas. Pasa más tiempo con ellos y menos en tu habitación.

No tengas miedo a lo desconocido, todos los días enfrentarás cosas nuevas y  de pronto te verás haciendo cosas para las que no te sentías preparada, pero te sorprenderán los resultados. 

Sigue adelante, te esperan maravillosos años de adultez, nuevos retos, nuevos triunfos y nuevas equivocaciones ¡Nunca pares de soñar, mantente auténtica y feliz! 

¿Mi último consejo? Siéntete orgullosa de tus raíces, de tu origen y de quienes estuvieron contigo, porque a ellos les debes lo que eres hoy y en cada acción y pensamiento los llevas dentro. ¡Eres parte de ellos!

cristina morales

Periodista, ilustradora, creadora digital

Periodista, ilustradora, creadora digital

Comunicadora social y periodista, con más de 15 años de trabajo en medios impresos del país. Creadora de la marca Maria Perfecta.

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